Los bolardos: un sector en auge

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Los atentados del pasado mes de agosto en Cataluña, sumados a los de similares características cometidos por el autodenominado Estado Islámico en Niza, Berlín, Londres y Estocolmo, han provocado que las principales ciudades blinden sus calles y plazas más céntricas y concurridas con bolardos y grandes maceteros para evitar este tipo de actos terroristas basados en atropellos múltiples. Esta situación ha provocado un importante crecimiento en las ventas de las empresas que fabrican este tipo de instalaciones. A nivel mundial el sector ha crecido un 30% en los últimos años.

A pesar de que las principales empresas españolas especializadas en este tipo de elementos urbanos se ubican en Madrid y en Barcelona, Andalucía cuenta también con numerosas entidades que los fabrican. Una de estas empresas es la sevillana Pregasa que ya ha fabricado bolardos de seguridad para los ayuntamientos de Málaga, Huelva y Almería en Andalucía y Santander, Alicante y Valencia.

Ante el crecimiento de la demanda algunas empresas andaluzas dedicadas al sector de los prefabricados de hormigón que tenían en su catálogo algún modelo de bolardos han aumentado la fabricación creando incluso nuevos productos específicos.

Este es el caso de la cordobesa Pagivesa que antes de los atentados fabricaba dos tipos de bolardos y ahora han creado un nuevo modelo más pesado y más seguro para satisfacer las necesidades de los nuevos clientes que suelen ser ayuntamientos y organismos públicos.

«A nivel de ventas aún no hemos crecido tanto, pero si que tenemos muchas más solicitudes de información y de presupuestos», comenta Álvaro González, jefe de Producción y Logística, que indica que ya se han interesado por sus servicios los Ayuntamientos de Sevilla, Puente Genil (Córdoba) y Torremolinos (Málaga), entre otros.

Además esta situación ha provocado que pequeñas y medianas empresas que no habían fabricado nunca este tipo de artículos comiencen a incluirlos entre su oferta para tratar de hacerse un hueco en el incipiente mercado. Prefabricados Campillos (Málaga) o Seyma (Sevilla) son alguna de las entidades que ya han comenzado a ofrecer estos nuevos equipamientos de seguridad, a la última algunos ayuntamientos de municipios sevillanos ya le han solicitado presupuesto para instalar en sus calles grandes maceteros.

El precio de los bolardos de seguridad varía mucho dependiendo de si son fijos o móviles, de su tamaño y de su peso. La mayoría de los que se están instalando en las ciudades andaluzas son fijos, los más básicos cuestan entre 25 y 50 euros si son de hormigón y entre 150 y 180 euros si son de acero inoxidable, aunque los más pesados y seguros cuestan alrededor de 500 euros.

Fuente: eleconomista.es