Los que invierten y financian el armamento. Esta banca es la bomba
Según el Centro Delàs, un centenar de grandes instituciones financieras de los Estados Unidos y otras de todo el mundo, recogidas en el ranking de las cien financieras con mayores inversiones en la industria armada, han financiado o invertido entre los años 2015 y 2019 más de 800 mil millones de dólares en 38 empresas productoras de armas. Entre estas se encuentran algunas de las principales empresas armamentistas del mundo, fabricantes de armamento nuclear y otras armas. Financiadoras como Vanguard, BlackRock, Citigroup, Wells Fargo y JPMorgan, que también lideran los rankings de entidades financieras más contaminantes del mundo, ocupan las primeras posiciones del ranking.
El BBVA y el Banco Santander ocupan respectivamente las posiciones 35 y 53 del ranking mundial. Las entidades españolas han financiado más de una quincena de empresas productoras de armas con un total de 8.300 millones de dólares (5.000 millones el BBVA y 3.200 millones el Banco Santander). También destaca una entidad pública como la SEPI con 3.596 millones de dólares.
Las exportaciones españolas de armas a Arabia Saudí y a los Emiratos Árabes Unidos, países que lideran la coalición que lanzó la operación militar “Tormenta Decisiva” en Yemen, entre 2015 y el primer semestre de 2021 alcanzaron un valor de 1.306.980.202€ y 311.219.441€, respectivamente, según un informe del Centro Delàs (2022, p.6 ). Entre las financiadoras principales de las empresas de armas que han exportado a Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos para su uso en Yemen vuelven a destacar el BBVA (3.401 millones de dólares), la SEPI (3.219 millones de dólares) y el Santander (1.830 millones de dólares). También aparecen otros bancos como el Sabadell, Bankinter, Bankia, y así hasta un total de 19 entidades bancarias.
La persona que desee obtener más información sobre este tipo de inversiones y financiamiento puede consultar la base de datos internacional banca armada, que ofrece datos relativos a la financiación de la industria de armamento por parte de entidades financieras, entre las que se encuentran los principales bancos, grandes empresas aseguradoras, fondos de pensiones, fondos de patrimonio soberano e instituciones públicas del Estado español y de todo el mundo. Los productos pueden ser: emisión de bonos, acciones y pagarés; créditos; fondos de inversión; fondos de pensiones.
Si queremos la paz, no financiemos las armas: no con mi dinero, pon tu dinero donde estén tus ideas
La actividad económica no es neutral. Toda decisión económica es una decisión ética y política. La forma en que producimos, consumimos, ahorramos y nos financiamos puede favorecer a unas prácticas económicas y un modelo de sociedad frente a otras.
Puede ocurrir que a la vez que nos manifestamos contra las guerras, realizamos marchas de protesta contras las bases estadounidenses y de la OTAN en suelo andaluz (Morón y Rota), nuestro dinero esté financiando esas guerras y el armamento destinado a las mismas por mediación de la banca convencional.
Y si no me gusta lo que hace la banca con mi dinero (financiar armamento, especular, crear burbujas, financiar industrias contaminantes, etc.) ¿Qué podemos hacer?, ¿hay alternativas? Sí, hay alternativas. Si estamos en desacuerdo con las prácticas de la banca convencional con el uso que hacen de nuestro dinero, dinero que le confiamos, debemos saber que existen lugares donde se promueve otra forma de hacer economía, una economía para la vida, más justa y sostenible.
Diferentes experiencias de las llamadas finanzas éticas (bancarias y no bancarias) demuestran que otra forma de ahorrar y financiarse es posible, que otra economía es posible. Y uno de estos espacios donde se practica y fomenta otra economía es Coop57.
Pero, ¿qué es Coop57? Es una cooperativa de servicios financieros éticos y solidarios, que promueve el ahorro ético y destina sus recursos a la financiación de proyectos de economía social y solidaria. Su objetivo es la transformación en positivo de la sociedad a través del uso del dinero: ahorro consciente y ético, y la financiación a entidades de economía social y solidaria. En resumen, realiza una labor de intermediación financiera que actúa como herramienta de transformación hacia otra economía.
Frente a las actividades que atacan y dañan a las personas y a la naturaleza (las guerras, industrias contaminantes, la especulación, etc.), Coop57 fomenta la ocupación desde la dignidad de las personas, el cooperativismo, el asociacionismo y la solidaridad, y promueve la sostenibilidad de la vida y del planeta sobre la base de principios éticos, democráticos y solidarios.
Bajo estas ideas y los principios de las finanzas éticas, el cooperativismo, la democracia, el carácter colectivo, la confianza, el arraigo en el territorio, la transparencia y el crédito con vocación de transformación social, hace 27 años, en 1995, nace Coop57. Unos años después un grupo de personas y entidades provenientes de la economía social andaluza deciden crear Coop57-Andalucía, un 27 de septiembre de 2008 (doce días antes se declaraba en bancarrota Lehman Brothers – el cuarto banco de inversión de los Estados Unidos e imagen del colapso financiero global-).
Pero si su función ya es importante, en el cómo lo hace encontramos el elemento radical y diferenciador de Coop57. Y es que Coop57 es una entidad de base asamblearia, gestionada por su propia base social: por las entidades de economía social y solidaria, las llamadas socias de servicios (y que son las que pueden recibir financiación y ahorrar), y las personas que depositan sus ahorros, denominadas socias colaboradoras.
Coop57 no tiene ficha bancaria y no está regulada por el banco central. Ello limita su actividad pues no puede ofrecer préstamos a las personas o servicios como cuentas corrientes, tarjetas de crédito, etc. Sin embargo, por otra parte, le da una capacidad de autogestión y una agilidad para dar respuesta a las necesidades financieras de sus entidades socias de servicios mucho más alta que las entidades financieras convencionales.
En definitiva, Coop57 es una alternativa al ahorro en la banca convencional y presta servicios financieros a proyectos de la economía social y solidaria. De esta forma las socias ahorradoras ven sus ahorros vinculados a proyectos de la economía social y solidaria, que funcionan con unas lógicas opuestas a la de la economía capitalista depredadora de naturaleza y personas.
Es la respuesta que demuestra que se puede actuar de forma diferente, democrática, recuperando el control y la capacidad de decisión sobre nuestros ahorros, para crear otra economía y sociedad. La cuestión, en resumidas cuentas, consiste en mantener tus ahorros en la banca convencional y, de ese modo, que continúen especulando o financiando guerras y explotación o, por el contrario, poner tu dinero donde estén tus ideas.
Autoría: José Manuel Betanzos. Autonomía Sur Cooperativa y Coop57 Andalucía.
Referencias y fuentes consultadas
Centro Delàs (2022). Exportación de armas españolas y presuntos crímenes de guerra en Yemen. http://centredelas.org/wp-content/uploads/2022/05/EMBARGADO12mayo_Informe53_CAST_CentreDelas_AmnistiaInternacional_ECCHR_DEF.pdf
Centro Delàs (2022). Base de datos internacional de Banca Armada. http://database.centredelas.org/banca-armada-es